Con la llegada de las fiestas navideñas, Santa Teresa recupera una sofisticada receta de la gastronomía tradicional. Se trata de la crema de marisco, elaborada con materias primas 100% naturales.
Esta crema es una selección de mariscos, buey de mar y las mejores verduras de la huerta, cocinadas con aceite de oliva virgen extra y aderezadas con un ligero toque de brandy.
A diferencia de otras existentes en el mercado, no contiene espesantes artificiales. Además, es fuente de Omega 3, baja en grasas y apta para celíacos, puesto que no contiene gluten.
Se presenta en un brick de 500 mililitros y está ideado para dos personas.