Los Estados Miembros de la Unión Europea han votado, en una reunión del Comité de Gestión, que el paquete de ayuda de emergencia para los productores de verduras frescas se cifre en 210 millones de euros.
Este plan, propuesto por el Comisario Europeo de Agricultura y Desarrollo Rural, Dacian Ciolos, permitirá a la UE pagar a los productores de pepinos, tomates, lechugas, calabacines y pimientos los productos que han tenido que retirar del mercado desde el 26 de mayo, como consecuencia del brote de E. coli en el norte de Alemania.
La decisión prevé el pago de un porcentaje máximo del 50% del precio de producción habitual del mes de junio. La cifra final sólo se conocerá el 22 de julio cuando los Estados miembros confirmen los volúmenes de hortalizas que deberá ser cubiertos por estas ayudas. El esquema también proporciona una cierta flexibilidad adicional a las organizaciones de productores para compensar a los agricultores asociados, por la retirada de las verduras del mercado.
Tras la identificación del origen de la contaminación, el Comisario Ciolos declaró sentirse “aliviado de que la fuente de la contaminación haya sido identificada, y que los consumidores pueden ahora disfrutar de las verduras frescas con plena confianza. Confío en que el consumo se recuperará muy rápidamente”.
“Esta es una señal importante para los productores de verduras frescas porque demuestra que Europa puede reaccionar con rapidez cuando es necesario”, asegura Ciolos.
Por su parte, España no se muestra satisfecha con la medida por considerarla insuficiente ya que no contemplan a todo el sector hortofrutícola.
En este sentido, el responsable estatal de frutas y hortalizas de la COAG, Andrés Góngora, ha insistido en la necesidad de que España cuente con un sistema propio de cuantificación de las pérdidas, que tenga en cuenta la actual coyuntura de su sector.
El sistema de retirada “le va muy bien” a países como Holanda, Bélgica, Francia o Alemania, donde los cultivos está en un “periodo inicial”, pero “no vale nada para un ciclo que está finalizando”, como el de España, ha remarcado Góngora.