En 2010, los precios de los alimentos para el consumidor aumentaron un 2,8% en la Unión Europea con respecto al año anterior, según un informe de la dirección de Agricultura de la Comisión Europea. En España, el incremento se cifra en un 0,8%.
En la media de la UE, este repunte superó al de la inflación general (2,6%), mientras que en España la inflación general en 2010 fue del 2,9% y superó al encarecimiento de los alimentos.
Los precios minoristas del pescado y del marisco aumentaron en España un 3,1%, mientras que las frutas crecieron un 1,5% y las hortalizas un7%. Se mantuvieron estables o con ligeras subidas los del pan y cereales (0,1%) y la carne (0,2%). Por su parte, bajaron los precios para el consumidor en el caso de la leche, derivados y huevos (-1%), aceites (-6,6%) y azúcar (-1,5%).
En España, subieron los precios del trigo blando (48%), trigo duro (34%), maíz (46%); cebada (57%), aves (25%) y vacuno (1%). Por el contrario, bajaron un 2% los del queso y la mantequilla, mientras que se mantuvieron estable los del porcino.