El mercado logístico ha cerrado el primer trimestre con una absorción de 227.000 metros cuadrados en Barcelona, un 21% superior a la registrada en el mismo periodo de 2018, mientras que Madrid y su área de influencia cierra este periodo con una contratación de superficie logística de 73.700 metros cuadrados.
Tal y como revela un estudio de Cushman & Wakefield, en concreto, en Barcelona la falta de disponibilidad empuja las rentas hacia arriba, llegando a una renta máxima de 6,7 euros por metros cuadrado al mes y con perspectivas de crecimiento.
La falta de producto disponible y de calidad, que se adapte a las necesidades del inquilino, está motivando el aumento de las operaciones de prealquiler y llave en mano en esta ciudad, dando como resultado el aumento del stock futuro de naves logísticas que saldrán al mercado 100% ocupadas.
Las operaciones más grandes del trimestre corresponden a dos desarrollos. Por un lado, DSV con un total de 46.000 metros cuadrados en Molins de Rei, y, por otro, Decathlon con 93.000 metros cuadrados en la ZAL. Se espera la entrega de ambos proyectos en 2020 y 2021, respectivamente.
En cuanto a Madrid, el estudio recoge que la actividad de la construcción se mantiene dinámica, igual que la compra de suelo para proyectos llave-en-mano. La tasa de disponibilidad de la superficie es del 5% al cierre del primer trimestre del 2019.
Las rentas siguen manteniendo su tendencia de suave incremento y la renta prime se mantiene en el mismo registro de cierre de 2018: 5,2 euros por metros cuadrado al mes. Por otro lado, continúa el interés de los inversores en este tipo de activos y todavía se observa cierta contracción en las yields prime de naves logísticas.