“Dentro del sector agroalimentario español, la industria de zumos y néctares sigue ocupando un papel fundamental. El liderazgo en la producción de frutas y hortalizas que caracteriza a nuestro país permite a los fabricantes disponer de la materia prima suficiente para elaborar zumos y néctares de calidad en cantidad suficiente para satisfacer el consumo interno y el de otros países”, ha asegurado Javier Lorenzo, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Zumos (Asozumos).
El último Informe de datos del sector elaborado por la Asociación Española de Fabricantes de Zumos (Asozumos) revela que en 2017 en España se consumieron 808,15 millones de litros de zumos y néctares.
En 2017, el volumen de exportaciones fue de 775.672 toneladas, lo que representa un valor de 730,63 millones de euros. Estas cifras suponen un superávit de 464,78 millones de euros, según datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Pese a estos datos alentadores, el consumo interno en España descendió el pasado año un 2,73% respecto a 2016.
Para combatir este descenso sería básico que el consumidor conociera las diferencias entre las categorías de zumos que se pueden encontrar en el mercado así como la legislación que regula su elaboración.
Por parte de Asozumos también hay conciencia de que el propio sector debe tomar la iniciativa en la puesta en marcha de acciones e iniciativas que permitan al consumidor elegir desde el conocimiento suficientemente informado y razonado y ofrecerle los productos que cumplan sus expectativas.
Plan de reformulación
Asozumos forma parte activa del acuerdo para 2017-2020, suscrito con la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, sobre la Mejora de la Composición de los Alimentos y Bebidas.
A través de este acuerdo, la mayor parte de la industria se compromete a reducir en un 10% el contenido de los azúcares añadidos en los néctares de melocotón, piña y naranja. Sólo los néctares pueden contener azúcares añadidos en una cantidad limitada legalmente, mientras que en los zumos de fruta no está autorizada legalmente su adición por lo que su contenido en azúcares es natural y se corresponde con el de las frutas de las que proceden.
Zumo de Fruta, en Serio: Se trata de una iniciativa europea de comunicación con base científica en colaboración con la Asociación Europea de Zumos y Néctares (AIJN) que tiene como objeto proporcionar información objetiva y rigurosa sobre el aporte nutricional del zumo de fruta dentro de un estilo de vida saludable. Más información en www.zumodefrutaenserio.es.
Sistema de autocontrol: Asozumos impulsó la creación de la Asociación Española para el Autocontrol de Zumos y Néctares (AEAZN), organización sectorial de servicios que, de acuerdo con el modelo vigente en la mayor parte de los países europeos, se ocupa de fomentar y vigilar en nuestro país la libre y leal competencia entre las empresas del sector mediante el control de la autenticidad y de la calidad de sus productos y de la lucha contra el fraude y la adulteración.
El sector de zumos es el referente administrativo nacional para el autocontrol de la calidad en el ámbito alimentario.
Sostenibilidad
En 2016, todos los productores de la industria del zumo miembros de Asozumos reforzaron su compromiso con la Responsabilidad Social Corporativa creando un nuevo Código de Conducta Comercial (COBC). Su objetivo es garantizar los principios básicos impuestos por la sectorial europea AIJN desde su plataforma RSC y operar de acuerdo con las normas relativas a los derechos humanos, el trabajo infantil, la salud y la seguridad, la sostenibilidad y el medio ambiente reconocidas internacionalmente.
De esta forma, Asozumos y AIJN apoyan el trabajo desarrollado en la plataforma para aumentar su transparencia y la de sus proveedores y para garantizar su compromiso en materia de sostenibilidad en todas sus operaciones, con el fin de lograr un sector más respetuoso con el medio ambiente, tanto dentro de Europa como en el resto de países productores de zumos de frutas.
• Minimización de los residuos
El impacto medioambiental generado por las fábricas del zumo lo producen principalmente los residuos sólidos y las aguas residuales. De ahí, que para este sector el principal desafío en materia de sostenibilidad es el aprovechamiento al máximo de los subproductos generados en su elaboración (pulpas, corteza), ya que así se disminuye el posible daño al entorno que podrían generar estos residuos.
En el caso de los cítricos, entre el 35% y el 55% de la fruta procesada, es subproducto que se puede aprovechar para obtener compuestos de alto valor añadido y de reutilización en diferentes sectores: fibra alimentaria, aceites esenciales, semillas o azúcares de frutas para su uso como ingrediente natural en yogures o alimentos infantiles.
•El consumo de energía y agua
La industria del zumo utiliza energía para, entre otras cosas, lavar la materia prima a partir de la que se obtienen los zumos o para la limpieza de los equipos e instalaciones y otros procesos necesarios para la elaboración de sus productos.
Como firme apuesta para reducir tanto el consumo energético como de agua, las empresas del sector están llevando a cabo auditorías energéticas y están implementando sistemas de medición y gestión para el uso responsable de energía y agua.
• Los cítricos y otros árboles frutales como sumideros de carbono
Las empresas de la industria del zumo están aprovechando la capacidad de asimilación de CO2 de los cítricos y otros árboles frutales para paliar los efectos del cambio climático y repercutir a su vez en la eficiencia de esta industria.
España se configura como un productor y exportador citrícola mundial, por tanto, también del zumo procedente de las frutas de este árbol. El estudio “La huella del carbono en plantaciones de cítricos”, desarrollado por un equipo del IVIA (Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias), demuestra que los cítricos en nuestras latitudes presentan una capacidad de asimilación de CO2 y un metabolismo muy estable y adaptado a condiciones cambiantes, lo que los convierte en un cultivo muy interesante y prometedor desde la perspectiva de la mitigación del cambio climático.
Para finalizar, destaca la variedad de colores, sabores y formatos en los que pueden comercializarse los productos de este sector y en el que, pese a que el abanico es muy amplio, el zumo de naranja continúa liderando la nómina de sabores preferidos con un 34%, seguido del zumo de piña y el de melocotón que representan el 19,2% y 17,8% respectivamente del volumen total consumido.