Gracias al Plan Unilever para una Vida Sostenible, la compañía ha logrado ahorrar 490 millones de euros en sus operaciones y ha impulsado su negocio dotando a 26 marcas de distintos propósitos sostenibles. Además, tras la puesta en marcha del Plan, dichas marcas crecen un 46% más rápido que el resto y representan ya el 70% del crecimiento de Unilever.
De este modo, la compañía especializada en alimentación, higiene personal y limpieza del hogar, hace un balance positivo sobre las mejoras acometidas tras la puesta en marcha de este Plan con el objetivo de reducir su impacto medioambiental e incrementar de manera positiva su impacto social.
Así, hasta el momento, Unilever ha cumplido el 80% de sus objetivos para 2020, que abarcan todas las marcas y categorías de la compañía e implica a todos los países en los que la compañía está presente a partir de tres objetivos: la mejora de la salud y el bienestar, la reducción del impacto ambiental y la mejora de la calidad de vida de las personas.
En la actualidad, el 39% de los alimentos de Unilever cumplen con los más altos estándares nutricionales en función de las directrices alimentarias reconocidas a nivel mundial. El objetivo de la compañía es que este porcentaje se eleve al 60% del portfolio de alimentación en 2020.
En este sentido, Unilever en España ha reducido el uso de la sal a la ingesta de cinco gramos al día en el 72% de sus alimentos y se espera que en 2020 esta medida alcance el 75% de los productos de alimentación. La compañía también ha reducido un 15% los niveles de azúcar en sus tés e infusiones, un porcentaje que se elevará al 25% en los próximos tres años.
Entre los objetivos alcanzados por Unilever en materia de nutrición, destaca la reducción de calorías de sus helados: el 80% de los helados envasados de la compañía contienen ya menos de 200 kcal, mientras que ningún helado infantil supera las 110 kcal. La compañía también ha eliminado el 100% de los aceites hidrogenados de todos sus productos eliminando de esta manera las grasas trans. Además, la compañía continúa trabajando para mejorar el etiquetado de todos sus productos y ofrecer así la máxima transparencia a los consumidores.
Huella medioambiental
En la última década, la compañía ha logrado una reducción del 47% en las emisiones de CO2 provenientes de la energía utilizada por cada tonelada de producción. Esto ha sido posible, en parte, gracias a que el 65% de toda la electricidad de la red usada en las operaciones de fabricación de Unilever proviene ya de recursos renovables.
Unilever también ha disminuido durante los últimos 10 años su huella hídrica un 39%, mientras que el total de residuos por tonelada de producción se ha reducido un 98%. Además, antes de 2025 todos los envases de plástico de Unilever serán 100% reciclables o compostables.
Todas estas mejoras se han aplicado también en la planta de producción que Unilever tiene en España, especializada en la elaboración de salsas para Calvé y Hellmann’s, y que está ubicada en Leioa (Vizcaya). Así, la fábrica ha reducido desde 2013 un 30% el uso de energía térmica, con el consecuente descenso de las emisiones de CO2, que se han rebajado un 38%. En el mismo periodo, Unilever ha disminuido un 32% el consumo de agua en la planta vasca. Todo este ahorro energético ha sido posible al mismo tiempo que la producción se incrementaba un 7% y gracias a la implementación del sistema STRATA, que permite a la compañía conocer el consumo energético exacto en tiempo real en la cadena de producción y, de este modo, detectar posibles deficiencias en el punto donde se producen.
Materias primas de origen sostenible
El compromiso de Unilever con el medio ambiente y con los consumidores está presente en todas las partes de la cadena de valor. De este modo, un 56% de las materias primas de la compañía son de origen sostenible. Es el caso del té de marcas como Lipton o Pure Leaf, un 81% del cual proviene de fuentes sostenibles con la certificación de Rainforest Alliance.
Por su parte, en 2017 Unilever ha obtenido el 98% del papel y el cartón utilizado en sus envases, de bosques administrados de manera sostenible y certificados o de materiales reciclados. También es de origen sostenible el 86% de la fruta que se usa para la elaboración de los productos de Unilever, el 74% de los lácteos, el 70% de todo el cacao, el 67% del azúcar, el 84% del aceite de colza y el 72% del aceite de soja.
A nivel local, todos los productos de Knorr se elaboran con tomates cultivados principalmente en España. Unilever ha puesto en marcha en Extremadura el primer campo de agricultura sostenible a gran escala junto con uno de sus principales proveedores, Grupo Conesa, líder mundial de la producción de tomate en polvo. Conjuntamente, ambas compañías han puesto en marcha un Catálogo de Buenas Prácticas en Agricultura Sostenible. Tras este reto, la producción se desarrolla con un control exhaustivo del gasto de agua y, además, se mantiene la biodiversidad de la zona, evitando el uso de pesticidas y fertilizantes.