En los últimos años, se ha producido una disminución del consumo de las comidas principales en detrimento del consumo entre horas, según el orme “Food of the Nation” elaborado por la consultora Kantar Worldpanel.
Verónica Valencia, Worldpanel Usage Director de Kantar Worldpanel y experta en hábitos de consumo, asegura que “el crecimiento de estas formas de consumo no es más que el reflejo de un cambio de hábitos hacia menús más desestructurados, en los que prima la conveniencia y la rapidez”.
En concreto, desde 2012 se preparan un 4,5% menos de platos caseros en casa, aunque todavía están presentes en un 86% de las comidas y cenas. Por el contrario, los bocadillos (17% de las ocasiones) y los platos preparados (9,8%) han crecido por encima del 2% en el mismo periodo. Los platos de snack y picoteo, habituales también en estas ocasiones de consumo (35,3% de todas las comidas y cenas), han evolucionado ligeramente y ahora están presentes en un 0,7% más.
Se abandona el tradicional menú de primero, segundo y postre, que está presente en un 2,8% menos de comidas y cenas desde 2012; mientras crece la presencia de platos para compartir (en un 3,1% más de los platos), incluso de los menús con un único plato (1% más).
En los últimos cinco años, la media mañana se posiciona como el momento snack dentro de casa que más ha estado creciendo, mientras aperitivo y después de cenar acumulan caídas periodo tras periodo.
“Hacemos comidas más 'simples', menos copiosas, y eso contribuye además a que crezca el consumo entre horas, alargándose la carga nutricional a lo largo del día. Esto supone una oportunidad para las marcas para adaptar sus productos a estos nuevos momentos de consumo, y compensar la caída de los que están reduciéndose”, explica Valencia.
La tendencia hacia lo saludable es clave en el crecimiento del mercado de los snacks, aunque el placer sigue teniendo mucha importancia en este tipo ocasiones. Así, no sólo crecen los alimentos y los métodos de preparación más asociados a una dieta saludable, sino que en el snacking entre horas, tradicionalmente muy ligado a un consumo por placer, es la salud la que está impulsando su crecimiento.
De hecho, el consumo de fruta, que se ha visto afectado en las comidas principales por la caída del postre, está compensando toda esa pérdida en un mayor consumo entre horas.