El grupo cárnico Torre de Núñez cierra el ejercicio de 2017 con una cifra de facturación de 23,5 millones de euros, es decir, un 7% más con respecto al año anterior.
La buena aceptación de sus productos, tanto por parte del mercado nacional como internacional, está marcando el crecimiento de la empresa cárnica que cerró el año con la consolidación de 100 puestos de trabajo directos.
Actualmente se puede encontrar la marca gallega en los establecimientos de las principales cadenas del país pudiendo afirmar que está presente en más de 4.000 puntos de venta sólo en España. Pero además, el esfuerzo de internacionalización realizado por la empresa sitúa a la marca en lugares tan diversos como Japón, Cuba, Moldavia o Alemania entre otros.
“En un mercado tan atomizado a nivel nacional como es el de elaborados cárnicos, el mercado exterior es cada vez más relevante”, afirman desde la empresa.
Para llevar a cabo esta expansión Torre de Núñez ha necesitado adaptar su catálogo a las necesidades y gustos de los diferentes mercados así como incrementar su capacidad productiva. En 2016 ampliaba sus instalaciones construyendo una planta de 2.000 metros cuadrados dedicada únicamente al loncheado de sus productos y a lo largo de 2018 terminará la ampliación de su secadero de jamones con lo que alcanzará las 500.000 piezas en estancia.