Caprabo ha iniciado la comercialización de cerezas con el sello de la Reserva de la Biosfera de Terres de l’Ebre. Esta certificación acredita desde 2013 el cultivo en una zona reconocida por la Unesco como reserva de la biosfera por ser un entorno natural que alberga una gran variedad de ecosistemas con un valor único.
Las cerezas proceden de la Ribera de Ebro, en concreto de las poblaciones de Miravet, La Torre de l’Espanyol, Maials, La Serra d’Almos y Tivissa.
Caprabo se convirtió a principios de año en el primer supermercado en comercializar cítricos con sello Reserva de la Biosfera. En concreto, naranjas y mandarinas con hoja procedentes de explotaciones situadas en las comarcas tarraconenses de Baix Ebre y Montsià. A través de Caprabo, este producto de gran calidad acreditado da un salto importante en el fomento de su conocimiento y su consumo.
La iniciativa se enmarca en el Programa de Proximidad por Comarcas que en los últimos dos años ha dado entrada a los supermercados de Caprabo a casi 300 pequeños productores y cooperativas agroalimentarias con más de 2.400 nuevos productos de proximidad. Caprabo avanza en su compromiso con la producción de proximidad y calidad y contribuye al fomento del conocimiento y consumo de los productos de la tierra, de productores agroalimentarios de las comarcas catalanas.
El sello Reserva de la Biosfera avala que las empresas productoras de estos alimentos certificados respetan y fomentan valores sostenibles en el ámbito social, económico y medio ambiental; es decir, son empresas transparentes, responsables con el medio ambiente, con los consumidores y con los trabajadores.
Actualmente, se comercializan con este el sello Reserva de la Biosfera de Terres de l’Ebre aceites, cítricos, mariscos, verduras, vino, carne y miel, unos productos que se cultivan en esta zona única que abarca desde la costa del Mediterráneo hasta las montañas y atraviesa las aguas del río Ebro.