La Confederación Española de Comercio (CEC) ha pedido al nuevo Gobierno de España que no suba los tramos del IVA ya que cualquier alza en los impuestos que gravan el consumo “supondría un mazazo para la frágil recuperación del comercio minorista”.
Para la CEC, la mejora que viene registrando el comercio “pese a ser prometedora, podría verse interrumpida” si se adoptasen medidas “que afecten a la confianza o al bolsillo del consumidor”.
El desplome de la confianza del consumidor, el crecimiento interanual de tan solo el 0,6% en las ventas del comercio minorista en el mes de octubre, siendo el peor dato desde noviembre de 2014 (0,3%), junto con el peor comportamiento de las empresas unilocalizadas, que con una mejora interanual del 0,1% se sitúa muy por debajo de las grandes cadenas (0,7%), las pequeñas cadenas (0,8%) y las grandes superficies (1,8%) dan lugar a una “brusca desaceleración”.
Por ello, la Confederación ha vuelto a “aplaudir el fin de la inestabilidad política” y ha expresado su deseo de que “el nuevo Ejecutivo pueda desterrar la desconfianza que sufren los consumidores”.