El ''efecto dominó'' del veto ruso hace saltar las alarmas en el sector porcino español. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) muestra su preocupación por la significativa caída de precios (20%) en este sector durante el último trimestre.
“Los meses de verano coinciden tradicionalmente con una tendencia al alza de los precios por el aumento del consumo. Sin embargo, este año se ha roto la tónica habitual y hemos sufrido una caída del 20% como consecuencia de la incertidumbre generada a escala internacional por el cierre de fronteras de Rusia a los productos cárnicos de la UE. De 1,48 euros el kilogramo a principios de julio hemos pasado a 1,21 euros el kilogramo en la última semana de septiembre.”, ha subrayado Jaume Bernís, responsable del sector porcino de COAG.
El sector porcino español consiguió encarar el cierre de fronteras ruso de principios de año abriendo nuevos mercados. Sin embargo, los grandes exportadores europeos (Alemania, Holanda y Dinamarca) intentan ahora introducirse en estos destinos y en mercados como el asiático se está empezando a sentir esa presión. A esto se une el cierre ruso a todas las carnes de Canadá y Estados Unidos, exportadores cárnicos tradicionales, en gran medida de porcino.
Si el veto se mantiene, las perspectivas apuntan a que esta tendencia se agudice en los próximos meses, situando las cotizaciones en el umbral de rentabilidad de las explotaciones porcinas. Ante esta circunstancia, COAG insta al Ministerio de Agricultura y a la Comisión Europea a que tengan en consideración al sector porcino y que pongan en marcha medidas de gestión del mercado, tales como las restituciones a la exportación o el apoyo a las campañas de promoción en terceros países que se están realizando desde la Interprofesional INTERPORC para facilitar la apertura de nuevos mercados y estudien la posibilidad del almacenamiento privado y la congelación de la carne de cerdo.
La producción final del sector porcino español alcanzó su máximo histórico en el año 2013, llegando a los 6.273 millones de euros, representando más del 39% de la producción final ganadera y el 14,2% de la producción final agraria, lo que consolida su importancia económica dentro del sector agrario. El sector es líder en producción porcina a nivel europeo, únicamente superado por Alemania y ocupa el cuarto puesto a nivel mundial.