Distribución El sector del gran consumo crece un 5,1% en valor a pesar de la crisis 6 octubre 2008En tiempos difíciles, el consumidor regula su presupuesto para mantener el consumo de lo que más necesita, sacrificando otras compras menos imprescindibles. Así, en el primer semestre del año, el consumidor mantiene sus compras en alimentación y droguería pero recorta en perfumería y textil.
La cesta de la compra sólo decreció un 0,1% en volumen, frente al aumento del 5,1% en valor -debido al aumento de los hogares del 2,3% y al incremento de precios de algunos productos básicos como el aceite de girasol, la leche o los derivados del trigo- durante los primeros seis meses de 2008, de acuerdo al estudio publicado hoy por TNS Worldpanel.
Las partidas de productos más imprescindibles como alimentación y droguería permanecieron estables, mientras las compras de perfumería, con una demanda más elástica, decrecieron un 1,3%. Fuera del gran consumo (alimentación, droguería , bebidas, frescos y perfumería ), el consumidor también ha ajustado sus compras de textil, de productos de impulso fuera del hogar como golosinas, helados y bebidas y de combustibles, otros mercados analizados por TNS Worldpanel, que cayeron en volumen un 2,4%, un 4,3% y un 7,6%, respectivamente.
El consumidor recurre a las marcas blancas para ayudar a equilibrar su presupuesto en alimentación y bebidas. Además, se ha visto obligado a ajustar su elección de marcas, del lugar en el que compra y de la frecuencia con que lo hace.
La cuota de la enseña del distribuidor sube más de tres puntos de cuota de mercado y alcanza el 31,8% en el primer semestre del año, frente al 28,6% que consiguió en el mismo período de 2007.
Por otra parte, durante el primer semestre de 2008, el canal discount concentró el 17,2% del gasto de las familias en las partidas de alimentación y bebidas (sin frescos perecederos), frente al 16,1% de cuota de mercado que recogió en 2007. Los mayores beneficiados de ese cambio en la elección del canal han sido Dia -cuya cuota ha pasado al 12% desde el 11% que conseguía el año pasado- y Lidl, que ha pasado del 3,6% al 4,1%.
Otra consecuencia de la crisis es que el consumidor ha dejado de reducir su frecuencia de compra. Durante el primer semestre de 2008, acudió 33,8 veces a comprar productos de alimentación y bebidas (sin frescos perecederos), una cifra ligeramente superior a las 33,5 que lo hizo en el primer semestre de 2007, pero que representa un importante cambio de tendencia respecto a los últimos años. Eso le permite cargar en su cesta los productos que realmente necesita, reduciendo un 2,9% el volumen de compra.