Dentro de su apuesta por la innovación, Wilkinson lanza al mercado su primera maquinilla de afeitar desechable fabricada con 95% de plástico reciclado.
Desde sus inicios en 1772, la marca se ha reinventado constantemente a lo largo de las décadas, para responder siempre con el mismo nivel de exigencia en el marco de la calidad y la innovación, en un mundo en constante cambio.
De este modo, con Xtreme 3 Eco Green, Wilkinson emprende un camino de Responsabilidad Social Corporativa ambicioso y que expresa plenamente su voluntad de desarrollar productos para un afeitado cada vez más responsable con el planeta.
Esta nueva cuchilla cuenta con un mango realizado con un 95% de plástico reciclado, y que también es, a su vez, reciclable. Después de su uso, basta con retirar las cuchillas para darle una nueva vida a esta herramienta de afeitado. Además, como en todas las cuchillas de la categoría Wilkinson Xtreme 3, su banda lubricante de aloe vera y sus tres láminas flexibles garantizan un afeitado cómodo y preciso, que se adapta a todos los contornos faciales.
Este proyecto se adentra de lleno en una estrategia global, en la que la firma se ha propuesto también un desafío en cuanto al envase de sus productos. En el caso de Wilkinson Xtreme 3 Eco Green, el cartón de su packaging está compuesto por más de un 90% de papel reciclado, un aspecto muy novedoso en la categoría de maquinillas para el afeitado desechables que encontramos en el mercado.
Este nuevo cambio hacia una producción más ecológica va más allá, ya que el cartón con el que está fabricado el envase de la nueva Wilkinson Xtreme 3 Eco Green cuenta con el certificado FSC, un sello que garantiza el abastecimiento y el uso responsable de los recursos naturales. Su packaging también es reciclable, lo que hace que este proyecto sea realmente coherente y vaya en línea con el propósito de Wilkinson.
“Ahora nos cuestionamos hasta el más pequeño de nuestros actos y su impacto sobre el planeta. El foco del consumidor se centra más que nunca en adquirir objetos que cuenten con el sello reciclable. Los consumidores desean optar por bienes de calidad, con una durabilidad a largo plazo y que permitan cuantos más usos, mejor. Por ello, los utensilios del día a día ya han iniciado su cambio hacia alternativas más ecológicas. Una toma de conciencia que cuida el planeta y que lleva a las marcas a reinventarse para responder a la llamada de crear un mundo más verde”, afirman desde Wilkinson.