El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha analizado con los representantes de la cadena alimentaria la nueva Ley de la cadena alimentaria, que se aprueba el próximo 2 de diciembre en el Congreso. Según el ministro, esta nueva ley permitirá trasladar los costes de forma transparente a los siguientes eslabones de la cadena y equilibrar el reparto de valor.
Planas asegura que será el instrumento fundamental para hacer frente a las actuales dificultades que atraviesan aquellos sectores agrarios más vinculados al encarecimiento de determinados insumos como los fertilizantes o los piensos.
El ministro ha destacado el ambiente “constructivo” mostrado por todas las partes intervinientes en la reunión, y ha reiterado que el Gobierno está comprometido con el sector para dialogar y para buscar soluciones de forma conjunta en el marco de la Ley de la cadena alimentaria, un “instrumento nuevo”, que el Gobierno modificó a instancias de las organizaciones profesionales agrarias y del conjunto del sector.
Planas ha pedido a los representantes de los agricultores y ganaderos, industria y distribución que cumplan la ley, de forma que agricultores y ganaderos puedan trasladar en sus contratos el incremento de los costes de producción al resto de escalones de la cadena. “Tenemos que ser capaces de dar respuesta en el ámbito de la ley. Todos se han mostrado dispuestos a asumir sus responsabilidades”, ha destacado.
Ha recordado que el Gobierno inició la reforma de la Ley de la cadena en 2020 a petición de las organizaciones agrarias, y ha asegurado que se trata de una norma muy importante porque va a suponer “un cambio en las reglas de juego y en la cultura de la negociación”. La ley supone un avance en la transparencia sobre la formación de precios y el reparto de valor en la cadena alimentaria.