La compañía cervecera española Mahou San Miguel destinará más de 180 millones de euros a apoyar a los hosteleros en 2021, gracias al nuevo Plan de Apoyo desarrollado por el grupo que incluye ayudas financieras personalizadas, el acondicionamiento de terrazas e iniciativas que promueven la digitalización y sostenibilidad de los establecimientos, pensando en su futuro a largo plazo.
“Estamos orgullosos de ser una compañía que antepone a las personas y que prefiere ganar menos para ayudar más. Eso nos ha diferenciado de otras cerveceras”, asegura Peio Arbeloa, director general de la Unidad España de Mahou San Miguel.
“Consideramos a la hostelería parte de nuestra familia y la familia está para apoyarse. No queremos que ningún hostelero se quede atrás y, con la campaña “Somos Familia”, nuestro objetivo es trasladarles a todos (pequeños, medianos y grandes bares y restaurantes) que seguimos aquí, porque todavía queda mucho por hacer”, añade el directivo.
En el marco de esta campaña, que podrá verse en televisión y redes sociales a partir del 15 de julio, y donde se cuentan historias reales de superación de algunos profesionales de la Hostelería que, tras momentos muy duros, vuelven por fin al trabajo, la compañía ha anunciado su nuevo Plan de inversión que seguirá centrándose en escuchar las necesidades de los hosteleros para el desarrollo de soluciones a medida para cada uno de ellos.
Con el objetivo de promover la digitalización del sector, a través de Rentabilibar, la plataforma de comunicación con sus clientes, Mahou San Miguel ofrecerá innovadores servicios como la posibilidad de realizar pedidos de producto de forma inmediata y más eficiente, lo que se suma a las acciones informativas y de asesoramiento que lleva implementando a lo largo de toda la pandemia desde este canal. Además, impulsará proyectos de transformación y emprendimiento en torno a la hostelería y promoverá, a través de herramientas digitales como BarraB.com, la generación de tráfico a bares y restaurantes, clave para la reactivación de los negocios y la fidelización de sus clientes.
El acondicionamiento de los espacios exteriores de los establecimientos será otra de sus prioridades, consciente de la importancia que tienen para el mantenimiento de la actividad hostelera. Así, está facilitando mobiliario, priorizando la distribución de terrazas 100% recicladas y reciclables y parasoles sostenibles con una innovadora tecnología que permite purificar el aire, tras la colocación de cerramientos y estufas realizada el pasado invierno, que significó para muchos hosteleros la posibilidad de abrir sus puertas y recuperar a sus empleados.
Aunque la situación para este sector ha mejorado, la hostelería “nos siguen necesitando. No todos los bares y restaurantes han podido abrir sus puertas y todavía queda mucho por hacer, de ahí que lancemos nuevas medidas de apoyo que contribuyan a asegurar el futuro de un sector clave para la economía nacional”, explican desde la cervecera.
De esta forma, Mahou San Miguel manifiesta, una vez más, el compromiso incondicional con la Hostelería que ha demostrado a lo largo de toda la pandemia. El pasado año, destinó más de 200 millones de euros a apoyar bares y restaurantes, lo que le supuso ganar un 98% menos respecto al año anterior. “Sacrificamos nuestro beneficio, conscientemente, para ayudar a este sector, uno de los más impactados por la crisis”, explican desde Mahou San Miguel.
El cierre de los establecimientos durante tres meses impactó mucho a el negocio de la cervecera, pero emplearon todos sus recursos en ayudar a la reapertura de bares y restaurantes, asegurando un menor coste para sus clientes. Para ello, reenfocamos gran parte de las inversiones que tenían previstas para el 2020.
Así, diseñaron un Plan Global de Apoyo a la Hostelería 360º enfocado a consumidores, distribuidores y hosteleros. Lo iniciaron en el periodo de confinamiento, pero continuaron trabajando posteriormente en iniciativas y medidas que ayudasen a la reactivación de sus negocios.
Esta hoja de ruta comenzó con una importante medida de apoyo de cara a la reapertura de los establecimientos tras el cierre decretado en el primer Estado de Alarma: una aportación extraordinaria de producto (cerveza y agua) que supuso para los hosteleros una facturación estimada de 75 millones de euros.
Además, con la llegada del frío, apoyaron a los hosteleros en el acondicionamiento de terrazas y espacios exteriores, facilitando que pudieran continuar con su actividad con elementos como estufas y cerramientos y contribuyendo a que los consumidores pudieran socializar de forma más segura. La inversión superó los 20 millones de euros y benefició a más de 65.000 hosteleros de toda España.