AECC, AECOC, ACOTEX y Marcas de Restauración, que representan conjuntamente a los sectores vinculados a la cadena de valor de la distribución, el comercio, la moda y la restauración en España, han solicitado al Gobierno que la reapertura de los centros y parques comerciales, así como los locales y establecimientos comerciales ubicados en los mismos, se incluyan en la Fase I, ya que afirman que están “en condiciones de garantizar la salud y la seguridad de sus clientes y sus trabajadores”.
Asimismo, según han destacado estas entidades en un comunicado conjunto, “con la apertura en la Fase I se evitaría, además, una discriminación incomprensible entre segmentos del ámbito del comercio”.
En concreto, explican que se trata de espacios gestionados por empresas profesionales dedicadas a asegurar las condiciones de seguridad e higiene necesarias en cada momento, tanto en su puesta en marcha como en su coordinación y control, lo que permite considerar que se trata de “espacios muy controlados”.
Asimismo, recuerdan que los centros y parques comerciales ya permanecen abiertos actualmente garantizando la seguridad y la higiene ya que más de 500 de estos activos están ya abiertos al público al albergar un importante número de los establecimientos comerciales cuya actividad se considera esencial. “Esto nos ha obligado a gestionar, ya desde el inicio de la crisis, medidas para garantizar la seguridad de todos los usuarios y el funcionamiento de las instalaciones como un espacio seguro para estar y comprar, sin riesgo de aglomeraciones ni en los locales ni en las zonas comunes de los centros. Ello nos ha permitido además desarrollar con éxito protocolos de seguridad e higiene complementarios a los que se puedan publicar desde los ministerios correspondientes”, señalan.
Por otro lado, estas entidades señalan que estos espacios “suponen un elemento tractor para la reconstrucción económica”, y añaden que “en un contexto de necesaria recuperación de la actividad contributiva, el sector de centros y parques comerciales contribuye al sumar a más de 36.000 comerciantes, de los que un 85% son pequeños comercios inferiores a 300 metros cuadrados (en su mayoría pequeños autónomos y pymes). Los datos de empleo a fin de 2019 superaron los 740.000 puestos de trabajo, entre empleos directos (cercano a un 50%) e indirectos”.
Por último, advierten que los centros y parques comerciales “no pueden vehicular un agravio económico a sus comerciantes”, ya que “no tiene sentido prohibir la apertura de los locales o establecimientos ubicados en centros y parques comerciales cuando el resto de locales y establecimientos comerciales fuera de los centros, sí van a poder abrir en la Fase I”.
A este respecto, señala que “de mantenerse esa discriminación, no solo conllevaría un grave perjuicio económico y reputacional, sino que el proceso de recuperación y vuelta a la normalidad no se haría en igualdad de condiciones ni de oportunidades para los comerciantes de los centros y parques comerciales. Si la reapertura se retrasa más allá de la Fase I se ahondaría en mayores pérdidas de ventas que dificultarán más la recuperación”.