Kimberly-Clark ha registrado durante el tercer trimestre del año uno ingresos netos de 4.952 millones de dólares, lo que supone un retroceso del 3,5% respecto a los meses de julio a septiembre del pasado año.
No obstante, la propietaria de marcas como Kleenex y Scottex obtuvo un beneficio neto atribuido de 907 millones de dólares, un 55% más en comparación con el tercer trimestre de 2023.
Por líneas de negocio, el negocio de cuidado personal disminuyó sus ventas netas un 2% hasta los 2.635 millones de dólares, mientras que el segmento de consumo facturó un 2% menos, hasta 1.539 millones de dólares y la división profesional redujo un 10% sus ventas, hasta los 767 millones de dólares.
De este modo, en los nueve primeros meses del año Kimberly-Clark obtuvo unas ventas netas de 15.130 millones de dólares, un 2% menos y un beneficio neto atribuido de 2.098 millones de dólares, un 67% más que un año antes.
En palabras de Mike Hsu, presidente y director ejecutivo de Kimberly-Clark, «nuestros resultados del tercer trimestre reflejan una sólida ejecución en toda la empresa a medida que transformamos nuestra organización. Estoy muy orgulloso de la capacidad de nuestros equipos para generar un crecimiento orgánico de los ingresos y los beneficios, impulsado por las ganancias de participación de mercado y la mejora de la productividad, incluso en el contexto de un entorno de consumo dinámico».
«Con nuestra estrategia Powering Care en pleno desarrollo, estamos acelerando nuestra línea de innovación y reduciendo los costos para ofrecer soluciones de consumo de mayor calidad para cada nivel de precio, y simplificando nuestra estructura operativa para que podamos ser más rápidos y tener mayor capacidad de respuesta en nuestros mercados. Estamos en camino de ofrecer un sólido crecimiento de las ganancias operativas, el margen y las ganancias por acción en 2024, al tiempo que invertimos para mantener nuestro impulso comercial en 2025″, añadió.