La organización interprofesional de la aceituna de mesa cifra en 558.000 toneladas la cantidad de aceituna de mesa que se prevé recoger este año. No obstante, tanto la calidad como la cantidad podrán variar en función de las lluvias que caigan durante los próximos meses, dado que el olivar sufre, hoy por hoy, una situación de estrés hídrico muy importante.
Desde la interprofesional califican la situación de falta de agua y humedad, agravada el pasado mes de agosto por la ola de calor, como crítica. Por ello, supeditan la cuantificación de este cuarto avance a la fecha de inicio y a la cantidad de agua que caiga durante las primeras lluvias. A fecha de hoy, publicado el segundo de los cuatro avances de aforo, la situación es optimista para las variedades extremeñas y negativa para las andaluzas.
Así, la comparativa de este segundo avance del aforo con respecto a la producción de 2020 es mala para la aceituna hojiblanca, de la que se esperan recoger 239.000 toneladas, lo que supone una caída de un 16,3%, seguida por la gordal y la manzanilla, de las que se recogerían 28.000 y 157.000 y que perderían un 20,2% y un 13,1%, respectivamente. En el otro lado de la tabla, en esta medición encontramos un incremento muy significativo de la variedad carrasqueña, de la que se recogerá un 911,1% más que en la campaña anterior y la cacereña, cuyo volumen crece en un 151,46%. De estas dos últimas variedades se espera recoger 69.000 y 44.000 toneladas, respectivamente.