Grupo MAS avanza para reducir el impacto de sus actividades en el entorno donde opera y por ello, dentro de su programa “Cero Desperdicios”, ha ido desarrollando en los últimos meses un proyecto piloto que vio la luz la pasada semana con la instalación de la primera planta fotovoltaica en la cubierta de uno de sus establecimientos Cash Fresh, ubicado en la localidad sevillana de Olivares.
“Esta planta nos permitirá abastecer a la tienda de energía limpia y cubrir así un 30/35% de sus necesidades energéticas. La energía generada es de consumo directo del supermercado y su instalación es particularmente afín a nuestro modelo de negocio, pues nuestro mayor gasto energético se presenta en horario diurno”, explica la compañía, que añade que “podría suponer una reducción del consumo de unos 87/93.000 kWh anuales, lo que implica dejar de emitir más de 33.000 Kg de CO2 a la atmósfera, el equivalente a haber plantado 1600 árboles en un año”.
En concreto, las placas que se están instalando son monocristalinas, autolimpiables y de alta eficiencia, con inversores de última generación para el máximo rendimiento de la energía generada.
Grupo MAS ha señalado que este proyecto, que se ha puesto en marcha con la instalación de esta primera planta, seguirá desarrollándose durante los próximos meses en otras tiendas y encaja a la perfección dentro de su política de RSC y su programa “Cero Desperdicios”, sumándose a otras iniciativas ya presentes en tiendas.