El comercio mundial de vino creció un 9,3% en valor durante 2022, hasta alcanzar su máximo histórico con 37.676 millones de euros, según datos de aduanas de distintos países analizados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv).
De este modo, se confirma el crecimiento ya observado en 2021, cuando el sector se sobrepuso de un muy mal 2020 a causa de la pandemia y otras amenazas comerciales que provocaron que bajara de los 30.000 millones.
Este gran aumento de la facturación deriva de un precio medio que batió todos los récords, con 3,60 euros/litro (un 14% más), influido por la fuerte inflación global. En concreto, el análisis de datos realizado por el OeMv muestra que el precio medio ha estado subiendo durante 23 meses consecutivos, alcanzando su máximo histórico en octubre de 2022 con 3,92 euros por litro. Sin embargo, hacia finales de 2022 se observó una desaceleración en el crecimiento en términos de valor y una ralentización de los aumentos de precios.
Por el contrario, el volumen comercializado cayó un 4,2% hasta los 10.477 millones de litros, tras tocar techo en 2021, con 10.931 millones.
Todos los vinos subieron de precio más del 10% en 2022, por lo que todos crecieron a un gran ritmo en valor y batieron récords, pese a que sólo se exportó más volumen de vino espumoso.
Los 11 primeros proveedores mundiales aumentaron su facturación, si bien sólo Australia y Nueva Zelanda vendieron más litros. Todos subieron de precio. Francia e Italia consolidan su liderato en valor; Italia superó dos años después a España como primer exportador en volumen.