PepsiCo pone en marcha su nuevo e innovador centro logístico en Villafría (Burgos) y que da soporte a la planta de snacks que la compañía tiene en Burgos desde 1971 cuando adquirió Matutano. Con la nueva operativa la compañía prevé aumentar las exportaciones a mercados internacionales como Francia, Italia, Portugal, Grecia, Chipre, Bélgica y Holanda.
En concreto, el nuevo silo automático cuenta con una superficie de 4.600 metros cuadrados de superficie y mide 42 metros de altura siendo así uno de los más altos de su tipo tanto a nivel local como nacional. La compañía ha apostado por este proyecto para incrementar y ejecutar una logística más eficiente y además, gracias al nuevo sistema de almacenamiento automatizado podrá ofrecer un mejor servicio al cliente.
En palabras de Ángel Valín, responsable de Logística Primaria de PepsiCo España, “tras una inversión de 16,7 millones de euros, este nuevo centro logístico destaca por su foco en la innovación y la sostenibilidad, dos elementos clave para seguir siendo competitivos en el mercado y mejorar en el servicio tanto para nuestra planta de snacks como para nuestro cliente final”.
PepsiCo quiere ayudar a construir un sistema alimentario más sostenible y por ello lleva desde 2006 trabajando en su Agenda de Sostenibilidad con el fin producir “más con menos” y de ejercer un impacto positivo allí donde está presente. En este sentido, el nuevo centro contará con una gasinera, que ha supuesto una inversión de aproximadamente 200.000 euros. La flota que realizará el transporte de producto entre la planta de producción y el almacén, utilizará gas natural comprimido (GNC) que permitirá reducir un 34% las emisiones de CO2 y un 87,2% de gases de efecto invernadero (GEI).
Y además, como parte de su compromiso social con la comunidad, el nuevo centro logístico cuenta con la colaboración de PROSAME, la Asociación Pro salud mental de Burgos, y favorecerá la inclusión laboral y social de este colectivo que dará soporte a la sección de “remanipulación”, adaptando el producto y el formato a las necesidades del cliente para asegurar que llegue lo más rápido posible.
“En PepsiCo siempre buscamos la mejora poniendo foco en innovación y eficiencia pero siempre junto a un firme compromiso con la sostenibilidad y las comunidades, y estoy convencido de que este nuevo centro es un gran ejemplo de ello”, destaca Víctor Pérez, director de la cadena de suministro de PepsiCo para el suroeste de Europa.
Esta factoría fue la primera planta que la multinacional adquirió en Europa, en el año 1971, y en la actualidad entre el personal de planta, oficinas y su centro de distribución cuenta con un equipo de más de 700 personas.