La Comisión Europea ha adoptado nuevas normas para proteger a los ciudadanos frente a las sustancias químicas que pueden tener consecuencias negativas sobre la salud.
En concreto, las nuevas normas limitan los niveles de cuatro sustancias químicas ambientales, sustancias perfluoroalquiladas (PFAS), en los alimentos. Protegerán a los consumidores de la UE al reducir su exposición a estos productos químicos nocivos.
Según ha explicado la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, “hoy estamos dando un paso más para aumentar el nivel de seguridad alimentaria en la UE y proteger mejor a los ciudadanos de los productos químicos nocivos. Estas nuevas reglas muestran que estamos comprometidos a poner la salud de los ciudadanos en primer lugar. Esta es una prioridad constante e inmutable”.
Los cuatro productos químicos en cuestión, el ácido perfluorooctano sulfónico (PFOS), el ácido perfluorooctanoico (PFOA), el ácido perfluorononanoico (PFNA) y el ácido perfluorohexano sulfónico (PFHxS), también se conocen como «productos químicos para siempre», ya que su compostura química no permite su descomposición. Los Estados miembros han apoyado unánimemente las nuevas normas que se basan en una sólida evaluación científica de la EFSA. Las nuevas reglas se aplicarán a partir del 1 de enero de 2023.