Beiersdorf, propietario de marcas como Nivea y Eucerin, redujo el pasado año sus ventas un 8,2% debido al impacto de la pandemia del Covid-19, situándose la facturación total del grupo en 7.025 millones de euros, según ha informado la compañía en un comunicado.
Asimismo, obtuvo un beneficio neto atribuido de 577 millones de euros, lo que supone una reducción del 21,7% en comparación con las ganancias registradas el año anterior.
Por zonas geográficas, la facturación en Europa se redujo un 7,7% hasta los 3.467 millones de euros, mientras que en América disminuyó un 1,8% hasta los 1.347 millones, y África, Asia y Australia registró unas ventas de 2.211 millones, un 12,4% menos.
En cuanto al coste de los productos vendidos en el conjunto del año, ascendió a 2.984 millones de euros, un 7,3% menos, mientras que los gastos de marketing y venta disminuyeron un 6,8%, hasta los 2.485 millones.
A pesar de la caída de las ventas, Beiersdorf ha afirmado que ha seguido adelante con su programa de inversiones para implementar la estrategia CARE +. Asimismo, ha anunciado que llevará a cabo inversiones adicionales de 300 millones de euros para mercados de sostenibilidad, digitalización y crecimiento durante los próximos cinco años
En palabras de Stefan De Loecker, director ejecutivo de la compañía, “2020 fue un desafío, pero también fue un año histórico para Beiersdorf. Nuestras prioridades claras en la crisis fueron garantizar la seguridad de nuestros empleados, continuar satisfaciendo las necesidades de nuestros consumidores y hacer todo lo posible para ayudar a la sociedad a combatir el Covid-19. Al mismo tiempo, aceleramos la implementación de nuestras prioridades estratégicas como parte de CARE +. Seguimos invirtiendo en los mercados de sostenibilidad, digitalización y crecimiento. Este enfoque ha dado sus frutos en términos de atractivo adicional de marca en todo nuestro Grupo. Queremos seguir construyendo sobre esto invirtiendo 300 millones de euros adicionales durante los próximos cinco años».