Pernod Ricard, el gigante del sector de bebidas espirituosas, ha anunciado la firma de un acuerdo para la venta de su portafolio de vinos internacionales estratégicos a Australian Wine Holdco Limited (AWL), un consorcio de inversores institucionales internacionales que también posee Accolade Wines.
La transacción permitirá a Pernod Ricard reforzar su estrategia de premiumización y centrar sus recursos en su cartera de marcas premium de bebidas espirituosas y champán, las cuales son el motor de crecimiento de su negocio. Este movimiento estratégico es parte de la continua evaluación de oportunidades por parte del grupo, alineándose con su política de generar valor sostenible para sus accionistas, empleados, clientes y otros grupos de interés.
El acuerdo incluye la venta de un extenso portafolio de marcas de vinos internacionales con fuerte presencia en el mercado. Entre las marcas incluidas están Jacob’s Creek, Orlando y St Hugo de Australia; Stoneleigh, Brancott Estate y Church Road de Nueva Zelanda; y Campo Viejo, Ysios, Tarsus y Azpilicueta de España. Este negocio, que genera más de 10 millones de cajas anuales de nueve litros desde tres países de origen, comprende una plataforma integrada desde el viñedo hasta la botella, e incluye siete bodegas.
Con esta venta, Pernod Ricard transferirá su división de vinos a una compañía con escala internacional y una estrategia de comercialización dedicada exclusivamente al sector vinícola. Esta especialización permitirá a las marcas de vino alcanzar su máximo potencial, fortalecer su posición en el mercado y explorar nuevas oportunidades globales.
Alexandre Ricard, presidente y CEO de Pernod Ricard, expresó su satisfacción con el acuerdo asegurando que “estamos muy contentos de haber encontrado en Australian Wine Holdco Limited una de las compañías líderes del mundo del vino, un socio ambicioso cuya estrategia se verá reforzada con nuestro prometedor portafolio. Estamos convencidos de que sabrán capitalizar el éxito que hemos cultivado a lo largo de los años”.
El cierre de la operación está sujeto al cumplimiento de las condiciones contractuales habituales, incluidas las autorizaciones legales pertinentes, y se espera que se complete durante el segundo semestre de 2025. Esta venta representa un paso significativo para Pernod Ricard en su objetivo de centrarse en el segmento premium, permitiendo a la compañía redirigir su atención y recursos a las marcas que impulsan su crecimiento y éxito en el competitivo mercado global de bebidas espirituosas y champán.