En un año tan complejo como el 2020, la empresa Torre de Núñez experimentó un incremento de facturación del 11,6%, alcanzando una cifra de negocio de 30 millones de euros, gracias en buena parte a su buen desempeño en el ámbito internacional ya que en torno al 10% de su producción se dirige a mercados exteriores, estando presente en 27 países de todo el planeta.
Así, esta empresa, una de las fundadoras del Consorcio del Chorizo Español, se marca como objetivo continuar con su expansión internacional y reforzar su posicionamiento como empresa innovadora en el sector. Esto se traduce en ampliar mercados y en reforzar la posición en los existentes.
Dentro de Latinoamérica ponen el foco en países como Colombia, Brasil o Chile, donde aún no tienen presencia. Por otro lado, pretenden afianzar las ya estrechas relaciones que mantienen con los principales países receptores de sus productos: Francia, Alemania, Italia, Reino Unido, Bélgica Noruega , Suecia, Japón, Hong, Panamá, Guatemala, Cuba, Venezuela y México.
La empresa está en constante crecimiento, avalada por los buenos resultados del pasado ejercicio. “La clave para conseguir tal logro está en una venta tradicional. Tenemos pocos clientes de horeca, por lo tanto, no nos repercutió el cierre de hostelería demasiado y las ventas durante el confinamiento crecieron sobre todo en libre servicio”, explica el director comercial de Torre de Núñez, Chema Santos.
El pasado ejercicio, la producción de chorizo en Torre de Núñez alcanzó la cifra de 843.836 kilogramos. “Para nosotros el chorizo está muy arraigado. Todos lo hemos consumido de una u otra forma”, señala el director general de la compañía, José Manuel Núñez . Entre los formatos de chorizo que más les demandan en los mercados exteriores se encuentran el chorizo sarta, el chorizo vela y los semicurados para cocinar, ya sea en tamaño tradicional o pincho.
Torre de Núñez, con sede en Lugo, inició su actividad en los años 60 con la distribución de elaborados cárnicos por toda España para, posteriormente, en la década de los 80, comenzar su expansión y crear una fábrica propia que cuenta con unos 12.000 metros cuadrados y que está dotada de la última tecnología. Recientemente, han realizado una inversión importante en una nueva instalación en el polígono de O Corgo, lo que permite a la empresa contar con cerca de 120 trabajadores directos.