Los zumos de sabores minoritarios como el arándano, el pomelo, la zanahoria, la granada o la mezcla de varias frutas combinadas han experimentado un crecimiento importante en los últimos años, una tendencia alcista que se consolida cada vez más.
Manuel Chico, responsable Técnico de la Asociación Española de fabricantes de Zumos (Asozumos), ha manifestado que “el aumento de disponibilidad de estos productos se debe a la apuesta de los fabricantes de zumos por la innovación en la elaboración de nuevos sabores, siempre con los máximos estándares de calidad, para adaptarse a la demanda de los consumidores”.
Las empresas productoras de zumos y néctares han optado por el lanzamiento de nuevos y exóticos sabores, que en algunos casos están asociados a ciertas propiedades nutricionales beneficiosas con el objetivo de adaptarse a las necesidades y demandas de los consumidores.
Según los últimos estudios, el crecimiento de la demanda de zumos no convencionales es especialmente destacable en algunas regiones de España, donde los sabores clásicos pierden adeptos mientras los zumos de nuevas frutas ganan terreno en la cesta de la compra.
De este modo, los valencianos prefieren los zumos más exóticos, especialmente, en verano cuando aumenta el consumo de zumos como el de pomelo, que duplica la media española; el de frutos rojos, con un 47% más; y el de arándano, con un 45% más.
Esta variedad de zumos también triunfa en Galicia. Los gallegos, junto con los asturianos, beben un 28% más de zumo de fruta roja que la media en España. Además, estas dos comunidades son las que mayor cantidad de zumos de frutas de varios sabores consume, un 25% más que la media española.
Cataluña y Aragón son las zonas españolas donde más zumo de tomate se consume, especialmente en verano, superando en un 32% la ingesta de zumo de tomate de la media nacional y duplicando el consumo del combinado de naranja y zanahoria, uno de las bebidas con mayor aporte de vitaminas.
Por otra parte, el zumo de manzana es el preferido en el País Vasco, Cantabria y Navarra, con una demanda de una 19% por encima de la media española.