Desde la organización agraria ASAJA Aragón se denuncia que cuando a nivel de la comunidad autónoma solo se lleva aproximadamente un 20% de cosecha de maíz, el descenso de los precios en estos últimos días suponen aproximadamente dejar de ingresar unos 45 millones de euros.
Desde esta organización agraria se observa esta circunstancia con gran preocupación ya que este descenso en los precios del maíz desde los 250 hasta los 200 euros/tonelada supone unas pérdidas de 610 euros/hectárea lo que se traduce en unos 45 millones de euros menos para los maiceros aragoneses; sin embargo los piensos no bajan, así que este descenso de los precios es un perjuicio claro para los productores de maíz del que no se están beneficiando los ganaderos con la consiguiente bajada de los precios de los piensos.
En el caso de los productores de maíz, este descenso acusado de los precios hace que se roce el umbral de la rentabilidad, casi no se cubren los costes de producción, cuando las expectativas para muchos agricultores con la segunda cosecha era recoger algo de beneficio, y esas ilusiones quedan por tierra, y encima el descenso de las materias primas no repercute en una bajada del precio de los piensos y con los productos ganaderos (carne) que siguen bajos, “pues realmente los perjudicados estamos siendo los dos, agricultores y ganaderos, y alguien se está llevando ese beneficio” señala ASAJA Aragón.