Los trabajadores de la planta de Sevilla de Clesa volverán a formar parte de la plantilla de Capsa tras rescindir anticipadamente el contrato de arrendamiento de industria firmado el 15 de octubre de 2008 entre ambas empresas.
Así, tras varios meses de negociaciones, Clesa (perteneciende al grupo Nueva Rumasa) y Capsa han alcanzado un acuerdo para dar solución a los trabajadores de esta planta. El elemento primordial de dicho acuerdo es la aplicación de la cláusula novena del contrato de arrendamiento de 2008, mediante la que se estableció que, en caso de resolución, la totalidad de la plantilla pasaría a depender de nuevo de Capsa, manteniéndose intactos los derechos de la totalidad de los trabajadores. Firmado el acuerdo, el pasado viernes, la plantilla íntegra de la fábrica de Sevilla ha sido dada de alta de nuevo en Capsa, como se había pactado inicialmente.
Mediante el acuerdo firmado se establece asimismo, que las instalaciones pasen a depender de Capsa desde el pasado viernes día 11 de marzo, según han informado fuentes de la compañía propiedad de Ruiz Mateos.
Por otra parte, es importante destacar que la firma del acuerdo y la devolución de la planta a Capsa permitirá el traslado de la línea de producción de yogures y postres a Caldas de Reis, garantizando los puestos de trabajo de esta fábrica e incrementando la producción en la misma.
La anticipación de la rescisión del contrato de arrendamiento de la fábrica de Sevilla y el traslado de la producción a Caldas de Reis, forma una parte del Plan Estratégico diseñado por Clesa para garantizar su viabilidad.