La empresa alemana 1&1 Internet presenta su programa Instant WebPro 1&1 que consiste, básicamente, en diseñar la propia web empresarial en cuestión de minutos y sin necesidad de conocimientos de diseño ni de programación.
Tener una tienda de ultramarinos o un pequeño supermercado y tratar de abrirlo a Internet no es fácil. Cualquiera que haya intentado crear una página web se ha encontrado con términos incomprensibles, aplicaciones complejas y la sensación de que no entiendes nada.
Este problema afecta principalmente a las pequeñas y medianas empresas españolas, que no tienen conocimientos para crear sus propias paginas ni presupuesto para encargarlas a un profesional. Resultado: se quedan fuera del mercado online.
Así, según una encuesta de TNS Infratest, sólo la mitad de las pequeñas y medianas empresas españolas tienen página web. Sin embargo, esta misma encuesta revelaba que cerca del 80% de las Pymes que carecen de web desearían tenerla, pero la falta de tiempo (43%) y de conocimientos (12%) y la complejidad de las propuestas (8%) les echa para atrás. Por eso, las Pymes que no tienen web suelen tenerlo claro: ante la posibilidad de tener una página, la inmensa mayoría (70%) prefieren soluciones basadas en plantillas. Es decir, los empresarios quieren una solución fácil, cómoda y rápida.
Es decir, si se quiere crear una página web para la tienda sólo hay que introducir el sector comercial, elegir un color, y la página está hecha en segundos. No es magia y tiene truco: la clave está en que los textos, estructura e imágenes de la web han sido desarrollados por especialistas de cada sector, así, una vez introducido el sector empresarial, el programa crea una página específica. Esto permite tener una web totalmente elaborada y con un aspecto profesional a los pocos segundos de registrarse, con textos e imágenes personalizados para la empresa.
Y si se quiere personalizar un poco más la pagina, incluir imágenes de productos, recetas, etc, se puede modificar a voluntad la web desde el navegador: cambiar la configuración de la página, el tipo y tamaño de letra y el color; modificar o agregar nuevas fotos, videos corporativos y logos, incluir nuevas opciones, etc. Esto permite evitar el principal error de las web de pequeñas empresas: diseños estáticos donde nunca cambia nada y que dejan de ser interesantes para los visitantes y potenciales clientes.