Un año después de eliminar las bolsas de plástico para la compra, Lidl vuelve ser pionera al sustituir las bolsas convencionales de sección de fruta y verdura por bolsas 100% biocompostables y biodegradables, elaboradas de fuentes renovables.
Con este hito, la compañía de distribución continúa avanzando en su compromiso de “ser el supermercado de referencia en materia de sostenibilidad en España y de aportar valor compartido a la sociedad”.
El proceso de retirada ya es una realidad en sus 23 establecimientos en Baleares y se completará en el total de las 580 tiendas de España hasta finales de año. De este modo, Lidl se adelanta a la entrada en vigor de la normativa nacional que prohibirá las bolsas de sección de plástico en 2021.
En concreto, este cambio representa quitar de la circulación más de 110 millones de bolsas de plástico convencionales al año en España, o lo que es lo mismo, 220 toneladas de plástico no biodegradable.
La nueva bolsa, además de ser biodegradable, también es biocompostable, tal y como certifica el sello “OK compost Home”, garantizando la biodegradabilidad en compost doméstico. Este hecho permite que se pueda descomponer en un plazo máximo de 12 meses sin poner en peligro el ecosistema, no dejando residuos tóxicos, al contrario que las bolsas de plástico convencionales que pueden tardar en desintegrarse hasta 500 años.
Además, a pesar de que estas nuevas bolsas cuestan cuatro veces más que las de plástico convencionales y suponen un coste de más de dos millones de euros al año para la compañía, Lidl “quiere seguir siendo sostenible sin repercutir ese sobrecoste a sus clientes, por ello estas nuevas bolsas seguirán siendo gratuitas”, ha destacado la compañía.