El Ministerio de Sanidad anunció hace unos días la implantación del sistema de información nutricional NutriScore que ha provocado cierta polémica. Para zanjarla, el Gobierno ha establecido que este nuevo semáforo sólo se implante en alimentos compuestos por más de un ingrediente. Por ello no es aplicable ni al aceite, la leche, la miel o los huevos, por ejemplo.
El modelo francés ya implantado es la base de la clasificación que se llevará a cabo en España, no obstante, aquí “se adaptará a la dieta mediterránea, para lo que se contará con los mejores expertos en la materia”, asegura el Ministerio en Twitter. Este modelo recomendado cuenta con una sólida base científica y se apoya en la normativa europea (reglamentos 1169/2011 y 1924/2006).
Además de Francia, ya lo están adoptando o lo adoptarán otros países de la Unión Europea, por lo que España se suma a la armonización de la información nutricional frontal que se ofrece a los consumidores europeos.
Este sistema está ideado para que el consumidor elija, de entre los mismos tipos de productos que se encuentran en el lineal, el más saludable. Con ello mejorará su dieta y se fomenta la mejora de la composición de los productos.
Este sistema de etiquetado frontal se implantará en alimentos compuestos por más de un ingrediente. Por ello no es aplicable ni al aceite, la leche, la miel o los huevos, por ejemplo.
— Min. Sanidad (MSCBS) (@sanidadgob) 17 de noviembre de 2018