En el comercio mundial de vinos espumosos, se venden más botellas de cava que de champán. Así, hay 156 millones de botellas exportadas de cava (117 millones de litros) en 2017, frente a los 149 millones de champán (112 millones de litros).
Sin embargo, el prosecco alcanzó los 273 millones de botellas (205 millones de litros), lo que le sitúa “muy por encima”, según informa el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv). No obstante, el valor generado por el champán no se puede comparar con cavas ni proseccos, ya que su precio superó los 25 euros el litro.
Italia ha liderado la subida del espumoso en los últimos años, ya que en 2009 exportó lo mismo que España y Francia y ahora, exporta el doble. El champán supuso el 31% de los ingresos totales por exportación de vino en Francia, frente al 13% que representaron el prosecco y el cava.