El volumen de negocio de la industria española del envase y el embalaje ha alcanzado la mejor cifra de negocio de la última década, hasta los 20.000 millones de euros en 2016, lo que supone un 12,4% más que en 2013 con un ritmo de crecimiento anual del 4,15% para el periodo 2013-2016.
Estas cifras suponen la recuperación del nivel anterior a la crisis económica, según el informe sectorial realizado por el salón Hispack de Fira de Barcelona con motivo de su nueva edición que se inaugura mañana martes.
En España, la industria del packaging cuenta con más de 2.100 empresas que emplean a 73.535 trabajadores. Los subsectores que más han aumentado el número de compañías en el trienio analizado son los de maquinaria, envases metálicos y plásticos. La especialidad que más personas emplea es el sector de plásticos para packaging con 19.000 trabajadores.
Por facturación, los subsectores líderes son el cartón ondulado (4.867 millones de euros) y el plástico (4.708 millones de euros), que representan más del 47% de la cifra de negocio agregada del sector, y crecieron a un ritmo del 22 y 17% respectivamente entre el 2013 y 2016. Le siguen, por este orden, el sector del papel, los envases metálicos, la maquinaria para packaging, la madera, el vidrio y el cartón.
Javier Riera-Marsá, presidente del comité organizador de Hispack, asegura que “la industria del envase y embalaje española ha consolidado su recuperación, ya que ha logrado mantener un crecimiento sostenido en los últimos ejercicios gracias a un mayor dinamismo de la demanda en el mercado interno”.
Por otro lado, las exportaciones son un importante motor para el crecimiento del sector y resultaron decisivas en los años de la crisis, alcanzando incrementos por encima del 5% en tres ejercicios consecutivos (2013-2015). En 2016, las ventas en el exterior de la industria del packaging subieron cerca de un 2% por valor de casi 3.000 millones de euros.
Riera Marsá explica que “las empresas españolas de la industria del packaging tienen un buen posicionamiento en el exterior, sobre todo en Europa, nuestro principal mercado, ya que hemos conseguido un buen equilibrio entre la calidad, el precio y la tecnología e innovación que ofrecemos. Pero a la vez es necesario, seguir explorando nuevos mercados y afianzando relaciones con países emergentes y con aquéllos que ofrecen nuevas oportunidades comerciales”.