La tasa anual del índice de Precios de Consumo (IPC) en el mes de febrero para el segmento de los alimentos y las bebidas no alcohólicas se sitúa en el 0,9%, cuatro décimas inferior a la del mes de enero.
Esta evolución se produce por el descenso de los precios de las legumbres y hortalizas, frente al aumento registrado en 2017, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La evolución mensual de los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas presenta una tasa del –0,2% y una repercusión de –0,033. Destaca en esta evolución las bajadas de los precios del pescado fresco y, en menor medida, la carne y las legumbres y hortalizas frescas. Cabe reseñar, también, aunque en sentido contrario, el aumento de los precios de las frutas frescas.
En total, en el mes de febrero, la tasa anual del índice de Precios de Consumo (IPC) general en es del 1,1%, cinco décimas superior a la registrada el mes anterior. La tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumenta tres décimas hasta el 1,1%, con lo que se iguala a la del IPC general. La inflación subyacente no era igual a la del índice general desde octubre de 2014.