Sandúa ha presentado sus primeros aceites de la campaña 2017-18. Se trata de los monovarietales de arbequina Capricho Navarro, fruto del olivar propio que Aceites Sandúa cultiva en Ablitas, sur de Navarra.
Capricho Navarro virgen extra es un puro zumo de aceituna, obtenido tras la primera prensada en y mediantes procedimientos mecánicos. De color verde amarillento, denso y con cuerpo, Capricho Navarro posee un sabor almendrado, amargo, ligeramente picante, pero dulce y fluido al final.
Todas estas cualidades se ven acentuadas con la recogida temprana de la aceituna, que según los catadores más expertos da lugar a “los mejores zumos de toda la campaña”.
Esto se debe a que la clorofila todavía se encuentra en el fruto, lo que origina unos aceites de gran aroma y sabor, inigualables frente a los del resto de la campaña. Por su intensidad casan bien con carnes, pescados, y crudos en tostadas.
Capricho Navarro se ofrece envasado en botellas de cristal verde oscuro, para preservarlo de la luz y que conserve mejor todas sus cualidades organolépticas.