En 2016, la marca de la distribución ha cedido cuota de mercado a favor de las enseñas de fabricantes. Así, ha caído 0,2 décimas, hasta alcanzar el 39,5% de las ventas totales.
“Por primera vez desde que se inició la crisis, la marca de distribución ha reducido su cuota de mercado, aunque sigue creciendo”, asegura Alfonso Delgado, responsable de Nuevos Mercados de Nielsen, durante la presentación del informe Nielsen 360.
De esta manera, se pone fin al crecimiento sostenido de este tipo de enseñas que se ha visto incrementado en los últimos años, con una subida de 13 puntos porcentuales desde 2006.
Las razones del estancamiento es la intensa actividad promocional de las marcas de fabricante en el punto de venta, con casi el 30% de las ventas en promoción, muy por encima de la media que se sitúa en el 21,5%.
Otro factor determinante es la capacidad innovadora de las marcas de fabricante que ofrecen al consumidor novedades más saludables o con mayor valor añadido, pilares de crecimiento del mercado de gran consumo.
Además, “el diferencial de precio entre marcas de distribución y de fabricante actualmente es más pequeño, lo que hace que el consumidor esté más dispuesto a pagar un poco más por enseñas que aportan mayor valor”, asegura Delgado.