Vichy Catalán rememora sus orígenes con una nueva botella de edición limitada que nos transporta en el tiempo hasta 1881, la fecha en que empezó la explotación industrial de esta marca mítica de agua mineral natural carbónica. El nuevo envase recrea el modernismo imperante en la época –presente en el logotipo histórico de la marca– transformado para la ocasión, gracias a un ejercicio de evolución en el diseño.
Vichy Catalán 1881 recrea las formas clásicas del modernismo de finales del siglo XIX y principios del XX adaptándolas a las exigencias de diseño del siglo XXI. Así, los elementos florales que siempre han rodeado al logotipo de la marca –el valle de Caldes de Malavella con los vapores de las aguas calientes remarcando el perfil del fondo montañoso– pasan a ocupar un lugar preeminente sobre la superficie de todo el envase. Las flores blancas y amarillas se apropian del vidrio que cobija al liquido elemento transmitiendo una sana sensación de frescor y pureza.
La inspiración modernista que envuelve el nuevo envase de Vichy Catalán –con profusión de líneas curvas, formas redondeadas y asimétricas y utilización de elementos vegetales– transmite unos valores culturales íntimamente ligados a las raíces y, al mismo tiempo, enaltece la personalidad única del producto. En medio de este esplendor de los elementos de origen natural destaca sobre un fondo blanco, en la parte frontal de la botella, su componente icónico principal: la marca. Vichy Catalán 1881.
La nueva botella de agua mineral natural carbónica se distribuirá en un único formato reciclable de 750 mililitros en los canales horeca y alimentación. Los otros envases de la gama tradicional de la marca también se continuaran comercializando.