Los nacidos entre 1994 y 2009 conforman un nuevo arquetipo de consumidor. Se trata de la Generación Z, jóvenes autodidactas, creativos, sobreexpuestos a la información, innovadores y emprendedores, según el informe “Generación Z: El último salto generacional”, presentado por Atrevia y Deusto Business School.
Así, Núria Vilanova, fundadora y presidenta de Atrevia, ha destacado que las dinámicas de consumo y comportamiento de este nuevo consumidor “son absolutamente diferentes a las de generaciones anteriores. El entorno digital en el que han forjado su personalidad supone que la reacción en tiempo real cuando interactuamos con ellos sea clave. Debemos ser capaces de adaptar los recursos y los sistemas a sus nuevas necesidades: puestos de trabajo, canales de comunicación, modelos de aprendizaje y diálogo deben ser replanteados para que la Generación Z se sienta integrada en la sociedad”.
Por su parte, Iñaki Ortega, director de Deusto Business School en Madrid, explica que “aquellos que pensaban que con los millennial ya habían cubierto su capacidad de asombro, estaban equivocados y de nuevo tendrán que seguir aprendiendo de los miembros de la Generación Z”. Para el autor del estudio, “lo que les define es que nunca antes hubo una generación que se haya educado y socializado con internet en sus bolsillos, eso les hace ser irreverentes con cuestiones hasta ahora sagradas como los padres, los profesores y los jefes, pero a la vez con más capacidad de empatizar, hacer amigos, ser emprendedores precoces e implicados socialmente que nunca antes. El mundo será mejor con ellos si el resto de generaciones somos capaces de conseguir los cambios que demandan”
El estudio revela que los miembros de la Generación Z se caracterizan por ser autodidactas y creativos, pertenecen a la primera generación que ha incorporado Internet en las fases más tempranas de su aprendizaje y socialización. Además, su personalidad ha sido conformada dentro de una sociedad líquida, diversa y en crisis.
El informe descubre las características esenciales de esta nueva generación a tener en cuenta por las marcas: Los jóvenes Z ya son consumidores de algunas de las iniciativas nacidas en el marco de la economía colaborativa, un fenómeno que esta generación entiende, apoya y acepta como algo natural. Muchos de sus integrantes irán sumándose a esta realidad emergente, tanto en calidad de usuarios, como también en calidad de emprendedores y proveedores de servicios.