Las ventas y ocupación en el comercio minorista en el pasado mes de enero, aunque en positivo (+2% y +1,8% respectivamente) retroceden 1,2 puntos respecto a la facturación registrada en diciembre, a pesar de ser el mes en el que tienen lugar las “rebajas” de invierno, siendo tradicionalmente un mes muy positivo para las ventas del comercio.
Así lo reflejan los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) de ventas y ocupación en el comercio minorista correspondientes al mes de enero. “Lamentablemente, el dato conocido hoy confirma nuestras estimaciones. Los comerciantes observan con preocupación cómo el consumidor comienza en los últimos meses a retraer su predisposición a la compra. Existe cierto clima de incertidumbre, lo que podría poner en riesgo la progresiva reactivación del consumo que tan necesaria es para nuestro sector, clave para la economía y el empleo del país”, advierte el presidente de la Confederación Española de Comercio, Manuel García-Izquierdo.
Esta moderación en el crecimiento de las ventas se suma al desplome del índice de confianza del consumidor que, tras obtener a lo largo de 2015 máximos de la serie histórica, ha caído 12,2 puntos en los últimos dos meses.
La buena marcha del comercio está íntimamente condicionada por dos factores: la confianza del consumidor y la renta disponible de los hogares. Cualquier variación en uno de estos elementos podría tener consecuencias negativas para el sector, como ya apunta la desaceleración en las ventas de los últimos meses.
“Somos conscientes de las dificultades existentes para conformar Gobierno, pero nuestros políticos también deben ser conscientes del riesgo que conlleva para un sector económico clave como el nuestro mantener en el tiempo un clima de incertidumbre como el que se está materializando”, explica García-Izquierdo.