De enero a septiembre de 2015, México, Brasil, Holanda y Bélgica aumentaron el volumen importado de vino español, ganando cuota de mercado en todos ellos, aunque Bélgica redujo levemente su inversión.
De este modo, España se distancia de Chile como primer proveedor de vino en México al exportar un 26,3% más de litros, aunque a costa de bajar bastante el precio medio de sus vinos (-19%). Así, el vino español supuso el 32,5% del volumen y casi el 30% del gasto total. México aumentó sus importaciones de vino un 12,6% en volumen entre enero y septiembre pero sólo invirtió un 0,3% más.
Por su parte, España aún tiene poco peso en Brasil (sexto proveedor) pese a ser el único país analizado que exportó más litros entre los seis principales, que abarcan casi el 100% de las compras brasileñas. Las importaciones brasileñas de vino cayeron un 2,3% en volumen pero crecieron un 20,8% en valor entre enero y septiembre. Chile, Argentina, Portugal, Italia, Francia y España concentraron en torno al 96% de las compras totales, con el vino español como único que creció en volumen, y con mejores cifras que la media de mercado en valor
Holanda y Bélgica redujeron bastante sus importaciones a nivel global, sobre todo por la fuerte caída de Francia, que lideró no obstante las compras de forma muy destacada en ambos mercados, e Italia, y pese al excelente desarrollo de España, que ya es primer proveedor en volumen. Holanda redujo sus importaciones de vino un 7% en volumen y un 5,6% en valor entre enero y septiembre, hasta los 256,9 millones de litros y los 634,5 millones de euros.