La campaña del Pimiento del Piquillo de Lodosa comienza con buenas expectativas. Así, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida asegura que la superficie cultivada este año asciende a 141 hectáreas, cuatro más que en la campaña del año pasado.
El número de parcelas inscritas es de 200, frente a las 168 de la campaña anterior y son 81 los agricultores inscritos.
Todos los procesos de cultivo, recepción del fruto, elaboración, envasado y certificación del producto final son supervisados por INTIA, Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias, que ahora está realizando las inspecciones de campo para garantizar el origen del producto.
Las previsiones son que se comience a elaborar en las conserveras a lo largo de la semana que viene con unas expectativas que también son muy positivas puesto que han sido muchas las industrias interesadas en elaborar Pimiento del Piquillo de Lodosa.
La calidad de los frutos es buena y el tamaño pequeño por lo que se espera obtener un producto muy fino. La recolección continuará hasta el momento en que se produzcan las primeras heladas, ya que el Piquillo de Lodosa se recoge conforme va alcanzado el color rojo, señal de que ya ha madurado.
En la actualidad son 13 las empresas acogidas a la Denominación de Origen Protegida que elaboran Pimiento del Piquillo de Lodosa y que en la campaña pasada recibieron 1.805 toneladas de pimientos del piquillo que transformaron en 1.574 toneladas de producto certificado. Se espera que para este año la producción sea incluso superior.