A raíz de una propuesta de la Comisión, el Consejo de Ministros ha decidido incluir a Belice, Camboya y Guinea entre los países cuya actuación contra la pesca ilegal es insuficiente.
De este modo, las medidas entrarán ahora en vigor contra las tres naciones para atajar las ventajas comerciales derivadas de la pesca ilegal. Ello significa que las importaciones en la UE de los productos de la pesca capturados por buques de estos países estarán ahora prohibidas y que los buques de la UE no estarán autorizados a faenar en las aguas de aquellos. Es la primera vez que se adoptan medidas de este tipo en la UE.
Maria Damanaki, comisaria Europea de Pesca y Asuntos Marítimos, asegura que “estas decisiones son históricas. Demuestran que la UE da ejemplo en la lucha contra la pesca ilegal. Quiero que los ciudadanos de la UE sepan que el pescado que consumen tiene su origen en una actividad sostenible, cualquiera que sea su procedencia. Nos dirigimos firmemente en esa dirección. Espero que esta lista negra actúe como un catalizador para que Belice, Camboya y Guinea intensifiquen sus esfuerzos y trabajen con la comunidad internacional para eliminar la pesca ilegal”.
La decisión es compatible con los compromisos internacionales asumidos por la UE para lograr la explotación sostenible de los recursos pesqueros tanto en la Unión como fuera de ella. El enfoque de la UE refleja el hecho de que la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) es una actividad delictiva mundial que perjudica no solo a los pescadores de la UE, sino también a las comunidades locales de los países en desarrollo.