El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha señalado que el nuevo acuerdo de pesca de la Unión Europea con Marruecos se encuentra en una buena situación, ya que el Gobierno marroquí tiene una muy buena disposición negociadora.
“Esperemos que en este mes de enero se puedan cerrar los aspectos técnicos y económicos”, dijo el ministro en Radio Nacional de España.
Arias Cañete espera que el Parlamento Europeo no bloquee el acuerdo por razones políticas. El ministro ha subrayado la urgencia de este nuevo acuerdo, ya que “el límite máximo de las ayudas para compensar la paralización de la flota es de un año y no se pueden prorrogar”. En cualquier caso, el ministro ha recalcado que, más que ayudas, lo que quiere la flota es volver a faenar.
El ministro ha recordado que la Comisión Europea negoció un mal acuerdo de pesca con Mauritania, con escasas posibilidades de pesca para la flota española. No obstante, el ministro ha señalado que, en estos momentos, “el Parlamento Europeo puede rechazar el acuerdo y, por lo tanto, puede ser renegociado”.
Durante la entrevista, Arias Cañete ha destacado que 2012, a pesar de los adversos factores climáticos, no ha sido un año malo desde el punto de vista agronómico. “Salvo el sector lácteo, el resto de sectores han tenido una trayectoria normal, y en la vertiente de las exportaciones el sector agrario y la industria agroalimentaria española tienen tasas de crecimiento acumulativas de entorno al diez por ciento”, ha señalado.
En relación con la leche, Arias Cañete ha expresado la preocupación del Gobierno por la situación de este sector, que ha realizado un importante esfuerzo para modernizar sus explotaciones, ““y ahora que se ha hecho esa inversión potente, no puede trasladar sus costes de producción, porque la leche se ha convertido en uno de los productos que se utiliza como producto reclamo y tiene un precio final muy bajo”.
Arias Cañete ha lamentado que esta situación esté provocando el cierre de explotaciones y la ruina de muchas familias. Por eso, “el Gobierno está trabajando para trasladar a la industria láctea y a la gran distribución la necesidad de un gran acuerdo nacional para conseguir un comercio lácteo responsable y poder mantener el potencial productivo español”.
Por otra parte, Arias Cañete ha asegurado que “una de las políticas socialistas más nefastas ha sido la del agua”. Según el ministro, el problema ha sido que en España se han dejado sin hacer las depuradoras y que las desaladoras están sin terminar, a pesar de las importantes cantidades invertidas. También ha lamentado que los planes hidrológicos de los grandes ríos no estuvieran terminados en su momento. Ahora, “cuando terminemos de ordenar todos los ríos, tendremos que hacer un plan hidrológico nacional y ver qué interconexión de cuencas podemos hacer”, ha asegurado.