La apuesta por la calidad ha determinado la evolución del sector vitivinícola hasta alcanzar 131 figuras de calidad diferenciada, el 45% de la producción. Del total, 91 son Denominaciones de Origen Protegidas y 40 representan a las Indicaciones Geográficas Protegidas.
Durante la entrega de los premios en la XXVI edición del concurso de vinos jóvenes “Premios Baco. Cosecha 2011”, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha asegurado que España fue pionera en implantar un sistema basado en la calidad que afianzó las denominaciones de origen y asentó el diseño vigente que considera “el vino como un alimento y otorgándole carta de naturaleza cultural”.
“España es el primer país del mundo en superficie plantada, con casi un millón de hectáreas, y la vitivinicultura contribuye a la economía agraria, al empleo, al asentamiento de la población y a la conservación del medio ambiente y el paisaje”, ha dicho el ministro.
Arias Cañete ha explicado que durante 2011 las exportaciones españolas de vino y mosto alcanzaron un record histórico, 25 millones de hectolitros, con un valor cercano a 2.500 millones de euros. “Crecemos más rápido que nuestros competidores, mantenemos destinos habituales -Europa, EEUU y Rusia- e incrementamos exportaciones a mercados emergentes, como China, con un aumento de casi un 50%. Y, en el primer cuatrimestre de 2012, el ritmo aumenta, un 14,7 % en valor y 6,8 % en volumen”, ha detallado.
El Ministro ha explicado que estos datos positivos son resultado de “una estrategia adecuada de información y promoción de la calidad, asumida por todo el sector en respuesta a la medida de promoción en países terceros, propiciada por la OCM”; aunque es preciso –ha añadido- afrontar “retos” como una comercialización que incremente el valor añadido de los productos.