Pago de Valdecuevas anuncia el lanzamiento de su emblemático AOVE General Blake con un diseño más práctico y vanguardista. Además, presenta mejoras en su proceso de elaboración, respetando la tradición artesanal y la excelencia que siempre han caracterizado a la marca.
El nuevo formato de 500 mililitros no solo ofrece una presentación más cómoda y manejable para los consumidores, sino que también mantiene el enfoque en la exclusividad del producto, del que solo se elaboran 3.000 litros. El renovado diseño de la botella resalta el origen y la historia que se esconde detrás de este singular aceite, el cual rinde homenaje a la batalla de Medina de Rioseco y al general español que lideró las tropas en Valdecuevas.
La fórmula mejorada del aceite General Blake es el resultado de un cuidado proceso de selección y elaboración. Un coupage exclusivo que combina las mejores aceitunas de picual (50%), manzanilla cacereña (35%) y arbequina (15%), recolectadas manualmente en su estado óptimo. El aceite se obtiene mediante procesos mecánicos y extracción en frío. Esto otorga a General Blake un carácter fresco, herbáceo y con un sabor prolongado en boca, ideal para maridar con una amplia variedad de platos.
El director técnico de la almazara, Jesús Aparicio, ha perfeccionado la mezcla para potenciar aún más los aromas intensos de manzana verde, hierbabuena, ciruela y tomate, así como los sabores herbáceos y frescos que lo convierten en un aceite de referencia para los amantes de la cocina gourmet.
Este relanzamiento del Aceite de Oliva Virgen Extra General Blake reafirma el compromiso de Pago de Valdecuevas con la innovación y la excelencia, brindando a sus clientes un producto de calidad excepcional en un formato más accesible, sin perder la esencia artesanal que lo ha hace tan especial. General Blake es un homenaje a la historia y a los valores que han definido a la región, convirtiéndose en un referente de calidad y sabor.
2023, una cosecha perfecta
El renovado General Blake está elaborado con aceitunas de la cosecha de 2023, un año en el que, según Jesús Aparicio, “la fruta presentaba una calidad excepcional gracias a las condiciones climáticas óptimas durante su etapa de maduración”. Esto, sumado a la agilidad en la extracción del zumo, propició aceites de “gran intensidad aromática y paladar muy equilibrado”. En total, en Pago de Valdecuevas se recolectaron mil toneladas de aceitunas, de las cuales el 90% correspondieron a arbequina y el resto a picual y manzanilla cacereña.
Las particulares características del pago potencian la calidad aromática de las frutas, lo que permite la elaboración de aceites de oliva virgen extra de una intensidad aromática superior a la que tienen los que se elaboran en climas más cálidos. Nutricionalmente, los aceites están compuestos por un índice mayor de polifenoles, vitamina E y ácido oleico.