El aceite temprano de la cosecha 2025-2026 de Olis Bargalló ya está aquí. Unos aceites de oliva virgen extra que, por ser los primeros, son de una calidad y unas características organolépticas extraordinarias y que este año, están marcados por unos rasgos únicos.
La campaña 2025–2026 ha arrancado de forma muy especial. Una campaña marcada por el calor y por los efectos visibles del cambio climático, pero también por el compromiso de la firma catalana con la innovación y la búsqueda de la máxima calidad. El resultado son dos monovarietales muy diferenciados: un arbequina más dulce y amable, y un picual extraordinario, potente y de aromas intensamente verdes.
Y es que, las temperaturas elevadas han condicionado el desarrollo de la oliva y han alterado ligeramente el perfil aromático de algunas variedades. Aun así, la apuesta de Olis Bargalló, una vez más, por adaptar los procesos, avanzar la cosecha y aplicar tecnología de última generación en la extracción en frío, hace que estos aceites nuevos preserven al máximo sus matices y la esencia del fruto.
Según Francesc Bargalló, CEO de la firma, “el cambio climático obliga a repensar métodos e innovar. Trabajar con precisión, controlar la temperatura y extraer en frío no es una opción: es la única manera de obtener un aceite excepcional”. Una apuesta que se confirma en la calidad de ambos monovarietales, calidad avalada, además, por el Panel de Cata oficial, que certifica la pureza y categoría virgen extra de los aceites.
El monovarietal arbequina, la elegancia de la suavidad
El aceite de oliva virgen extra arbequina 2025–2026 de Olis Bargalló es un aceite que sorprende por su dulzura natural y una entrada en boca suave y muy limpia. A pesar de presentar un perfil aromático algo menos intenso que en otras añadas (consecuencia directa del calor), mantiene un equilibrio impecable, con notas finas que evocan tomatera fresca y hojas de olivo.
Un aceite, en definitiva, tan armonioso que lo hace especialmente versátil. Un monovarietal amable y elegante, ideal para ensaladas, pescados blancos, verduras, carpaccios o para dar un toque sutil a platos delicados.
Un picual extraordinario, verde, intenso y poderoso
Si el AOVE arbequina destaca por su delicadeza, el picual 2025–2026 de Olis Bargalló es, sencillamente, extraordinario. Una de las mejores añadas de los últimos años, si lo que se busca es carácter, fuerza o potencia. Porque es un aceite muy verde, vigoroso y lleno de personalidad, con aromas marcados a alcachofa, hinojo, hierba cortada, y un amargo y picante elegantes y persistentes. Un aceite que en boca es potente y lleno de matices. Rasgos que lo hacen perfecto para saborear en crudo y para armonizar con verduras a la brasa, tostadas de pan, carnes, pescados grasos y platos que necesitan un toque protagonista. Además, este año, la producción será bastante buena, hecho que permitirá garantizar disponibilidad y estabilidad de precios.
Como ya es habitual, los mejores aceites de la casa se presentan en los mejores envases. Para el mejor monovarietal arbequina se reserva, como siempre, la icónica Màgnum de 1.500 mililitros, también disponible en caja deluxe para regalar (perfecto para estas próximas Navidades). Y tanto el arbequina, como el picual, se presentan en botellas prémium de 500 mililitros (también disponibles en caja deluxe), así como en botella elegance de 250 mililitros, y en latas (tres litros y 500 mililitros).
Todos ellos, envases que mantienen y conservan mucho mejor las calidades organolépticas del oro líquido, alargando así su vida.










