Mercabarna ha cerrado el año 2019 con un volumen de 2,3 millones de toneladas de alimentos comercializados, lo que supone un 4,2% más con respecto a 2018, gracias al buen comportamiento experimentado por las empresas del sector hortofrutícola.
El incremento del volumen de ventas del sector hortofrutícola es consecuencia de la gran oferta de productos que ha presentado el gran mercado, durante todo el 2019, como consecuencia de una climatología muy favorable en España. A esta afluencia de producto hay que sumarle la tendencia de los ciudadanos a consumir, cada vez más, alimentos más saludables, ya sea en el hogar o a través de los servicios de la restauración.
Otro factor que ha contribuido al aumento de las ventas es el crecimiento de compradores extranjeros que adquieren alimentos directamente en el mercado, “porque encuentran en Mercabarna una gran oferta y variedad para distribuir por toda Europa”, aseguran desde el mercado en un comunicado.
Así, el volumen de ventas de frutas y hortalizas asciende a 2,1 millones de toneladas, un 4,6% más que en 2018. Del total, 1,2 millones de toneladas fueron comercializadas desde el Mercado Central y 896.079 toneladas fueron distribuidas desde la Zona de Actividades Complementarias de Mercabarna.
En cuanto al pescado y marisco fresco y congelado, Mercabarna ha experimentado un crecimiento del 1,2% frente al año 2018, con un total de 209.111 toneladas. De éstas, 71.373 toneladas fueron comercializadas desde el Mercado Central y 137.738 toneladas fueron distribuidas desde la Zona de Actividades Complementarias de Mercabarna.
El recinto de Mercabarna agrupa 700 empresas alimentarias de venta al por mayor y especializadas en añadir valor al producto (maduradores de frutas; lavado y envasado de tubérculos; lavado, cortado y envasado de frutas y hortalizas; escamado y eviscerado de pescado; viveros de marisco; cuartas y quintas gamas de pescado y carne, y todo tipo de servicios logísticos especializados en alimentos perecederos) y emplea a 7.500 trabajadores directos.