Las limitaciones territoriales de suministro, las restricciones impuestas por los fabricantes de marcas mundiales y otras limitaciones que existen al comercio entre estados miembros de la Unión Europea cuestan a los consumidores europeos más de 14.000 millones de euros al año. Por ello, el Comité de Mercado Interior y Consumidores del Parlamento Europeo (IMCO) ha adoptado un informe de iniciativa propia del eurodiputado Kosma Złotowski sobre la lucha contra las barreras no arancelarias en el mercado único e insta a la Comisión a adoptar medidas inmediatas para abordar estos problemas.
“Nuestro ecosistema se basa en el mercado único para proporcionar a nuestros clientes lo que necesitan a un precio asequible. Este informe de propia iniciativa contiene algunas propuestas excelentes que apoyamos, incluido un informe anual sobre barreras no arancelarias. Alentamos encarecidamente al plenario a respaldar plenamente el informe cuando vote en diciembre. En particular, el informe subraya de manera útil que es necesario hacer más para hacer cumplir las reglas del mercado único y revertir una tendencia que fue evidente durante la pandemia del Covid de introducir nuevas barreras nacionales”, asegura la directora general de comercio digital, Christel Delberghe.
El comercio minorista y mayorista opera en un entorno altamente competitivo. La competitividad europea, tanto a nivel mundial como a nivel nacional, solo puede lograrse garantizando un mercado único que funcione para todos los actores y consumidores. Hemos visto a muchos gobiernos, particularmente en Europa Central y Oriental, introducir regularmente leyes proteccionistas y discriminatorias, que violan la libertad de establecimiento y la libre circulación de mercancías. La Comisión se ha centrado en una mejor aplicación de las normas del mercado único y esperamos que el grupo de trabajo de aplicación de las pyme actúe de forma decisiva para hacer frente a las barreras nacionales y el hecho de que los Estados miembros no notifiquen nuevas medidas en virtud de las Directivas de transparencia y servicios. En los servicios, el mapeo de barreras de la Comisión muestra que están aumentando en el comercio minorista y mayorista.
Un informe de la Comisión el año pasado subrayó el efecto de las restricciones territoriales de suministro impuestas por los mayores fabricantes de marcas de productos comestibles que impiden que los minoristas y mayoristas se abastezcan a escala europea o elijan dónde comprar. Estos pueden adoptar diversas formas como negarse a suministrar excepto a través de su distribuidor nacional o amenazar con dejar de suministrar a un distribuidor en particular, limitar las cantidades disponibles para la venta, diferencias inexplicables en las gamas de productos y precios entre los Estados miembros o limitar las opciones de idioma para el embalaje de los productos.