Se estima que las explotaciones ganaderas de la UE produjeron 161,8 millones de toneladas de leche cruda en 2024. Esto supone un aumento de 0,9 millones de toneladas con respecto a 2023 y de 12,1 millones de toneladas con respecto a 2014, según Eurostat, que destaca que “este último dato confirma el crecimiento relativamente constante de la producción de leche cruda en la UE durante la década hasta 2024”.
La mayor parte de la leche cruda producida en 2024 se entregó a las lecherías (150,8 millones de toneladas) y se utilizó para producir una variedad de productos lácteos frescos y elaborados.
En concreto, la mayor parte de la leche de la UE se destinó a la producción de queso y mantequilla. De hecho, 59,9 millones de toneladas de leche entera, junto con 17,0 millones de toneladas de leche desnatada, se utilizaron para producir 10,8 millones de toneladas de queso. Otros 44,2 millones de toneladas de leche entera se emplearon para producir 2,3 millones de toneladas de mantequilla y los denominados «productos amarillos» (como la mantequilla clarificada y la mantequilla fundida), y generaron 41,5 millones de toneladas de leche desnatada.
Alemania fue el mayor productor de leche para consumo en la UE, representando el 18,8% de la producción total. También fue el mayor productor de la UE de productos lácteos acidificados (27,1%), mantequilla (20,6%) y queso (22,5%).
España fue el segundo mayor productor de leche de consumo de la UE, con el 15,2% del total, seguida de Francia (12,7%). Los Países Bajos fueron el segundo mayor productor de productos lácteos acidificados (16,8%), seguidos de Polonia (10,4%). Francia fue el segundo mayor productor tanto de mantequilla (17,2% del total de la UE) como de queso (17,8%). Irlanda representó la tercera mayor proporción de la producción de mantequilla de la UE (14,8%).










