Cooperativas Agroalimentarias de España ha elaborado la previsión de cosecha de fruta de hueso para este año 2021 y se confirma que la producción global de melocotón, paraguayo, pavía y nectarina será, por segundo año consecutivo, considerablemente menor a la registrada en el año anterior, alcanzando este verano las 1,2 millones de toneladas, es decir, un 6% menos que en 2020, año ya fue muy ligero en kilogramos, y un 20% menos que la media de los últimos cinco años.
La organización ha presentado este martes estos datos por videoconferencia, primero en la reunión del Grupo de Contacto de Melocotón, Nectarina y Albaricoque del Comité Mixto Hispano-Italo-Francés y seguidamente en la presentación de datos de Europech, en el marco de la feria MEDFEL, foro europeo en el que los representantes de los principales países productores de la UE (Italia, Francia, Grecia, España) colaboran desde hace 30 años para poner en común su información sobre la estimación de la producción.
En su intervención, el presidente del Grupo de Trabajo de Fruta de Hueso de Cooperativas Agroalimentarias de España, Javier Basols, destacó los siguientes datos para España: en nectarina, que supone el mayor volumen en el grupo de productos analizados, se alcanzarían las 442.612 toneladas (es decir, un -5% y 25.000 toneladas menos que en 2020); le seguiría en producción la pavía con 285.420 toneladas que sufriría una menor caída, sólo un -3,5%, y a continuación el melocotón, para el que se prevé un montante de 264.343 toneladas (-2% y 5.000 toneladas menos que en 2020). Y, por último, estaría el paraguayo que continúa esa tendencia bajista, y que pondrá en el mercado una producción casi un 14% por debajo de la de 2020 (226.319 toneladas).
Además de la valoración cuantitativa, en el debate se destacaron los importantes daños ocasionados por las graves heladas de mediados de marzo, que han afectado principalmente a las zonas productoras del Valle del Ebro y a la fruta de media estación.
Estas circunstancias meteorológicas adversas han afectado también al resto de Europa, lo que explica la caída global de la producción de melocotón, nectarina, paraguayo y pavía, en el conjunto de países, concretamente un -18% respecto a 2020, situándola en 2.420.641 toneladas. Esta cantidad representa una caída de hasta el 37%, si se compara la previsión 2021 con el potencial productivo medio (y no con la de 2020 que ya fue un año atípico para el conjunto de la UE).
De los datos proporcionados por el resto de los países, destacar que la producción de Italia, el siguiente país productor europeo, caerá aún más que en 2020 pues los daños por helada primaveral de principios de abril han sido aún más drásticos y han llegado en avanzado estado de floración de los frutales. Así, Italia registrará una mayor merma en su producción a la prevista para España: comercializará unas 77.000 toneladas menos (es decir una caída del 10%) con pérdidas en la práctica totalidad de regiones. Las cifras presentadas por esta delegación apuntarían a una producción de melocotón en 2021 de 333.358 toneladas; para nectarina, con 333.758 toneladas, y para pavía 55.431 toneladas.
Por su parte, Francia y Grecia también dispondrán de volúmenes para 2021 aún más mermados que en 2020, quedándose por debajo de las 120.000 toneladas y las 360.000 toneladas, respectivamente, es decir una reducción de la mitad de su potencial productivo cada una.
Durante Europech, los expertos han compartido información de otras producciones, destacándose, por parte de España, la situación particular de la ciruela para la que se espera un incremento de la producción muy significativo respecto a 2020, +33%, fundamentalmente en Extremadura.
Las estimaciones de la producción de albaricoque fueron presentadas anticipadamente, en el marco de la feria MEDFEL el pasado 4 de mayo, cuando se anunció que la producción prevista en España caerá por segunda campaña consecutiva, situándose en 89.203 toneladas (-12% comparado con 2020).
Buenas perspectivas de consumo
Respecto al comportamiento del mercado, Javier Basols, ha manifestado su confianza en que la salida de la fruta de las distintas regiones se produzca de manera fluida y con cotizaciones acordes con la situación del mercado. Por otra parte, se espera que la climatología en los principales focos de consumo en Europa alcance pronto y sostenidamente temperaturas estivales, favorables al consumo, y que la demanda alimentaria en la UE cada vez más interesada en productos saludables y sostenibles favorezca también al productor de fruta de hueso.
Todos los representantes europeos se han mostrado confiados en que en un contexto de cosecha europea corta y de buena calidad, las cotizaciones serán equilibradas y permitirán compensar las pérdidas de productividad de la mayoría de las explotaciones y los incrementos de costes de producción soportados por los agricultores y sus cooperativas, en mano de obra, en inputs o los derivados de las medidas excepcionales por la gestión de la Covid.
De este modo, los expertos reunidos cerraron la sesión con un mensaje de confianza, recordando “la capacidad del sector europeo de garantizar, otra vez este verano, el suministro de fruta de hueso a la población en condiciones de máxima calidad, seguridad y continuidad a pesar de las difíciles condiciones derivadas de la crisis sanitaria”.